Las entrevistas de selección han evolucionado para adaptarse a las demandas cambiantes del mercado laboral, pasando de ser exclusivamente presenciales a adoptar un enfoque virtual y últimamente y cada vez más, un enfoque hibrido (combinación de entrevistas virtuales y presenciales).
Históricamente, las entrevistas laborales se realizaban en persona, cara a cara. Este formato ha permitido a los reclutadores evaluar aspectos clave de los candidatos, como la comunicación no verbal y la capacidad para interactuar en un entorno social. Sin embargo, la tecnología ha abierto nuevas puertas para el proceso de selección, haciendo posible que las entrevistas se realicen virtualmente, lo que hace que el reclutador pueda acceder a una base de talentos más amplia, sin importar la ubicación de los candidatos. Esto es especialmente relevante en un contexto globalizado, donde las empresas buscan atraer a los mejores talentos, independientemente de su ubicación, permitiendo además una mayor flexibilidad en cuanto a horarios y a que los candidatos puedan participar desde la comodidad de su hogar o del lugar donde se encuentren, adicionalmente, las entrevistas virtuales permiten que los procesos pueden acelerarse, lo que mejora la eficiencia general de la selección.
Sin embargo, a pesar de la popularidad de las entrevistas virtuales, las entrevistas presenciales siguen siendo una parte esencial del proceso de selección, especialmente cuando se trata de evaluar candidatos para roles que requieren habilidades interpersonales o de liderazgo, pues permiten una mayor conexión emocional entre el reclutador y el candidato, lo que facilita una mejor evaluación de las habilidades sociales, la empatía y la capacidad de adaptación del candidato en un entorno corporativo. Adicionalmente, facilitan que los candidatos conozcan la empresa de manera más directa, observando el ambiente de trabajo y la cultura organizacional que pueden ser factores decisivos para que tomen una decisión de vinculación y por otro lado, le dan la oportunidad al reclutador de observar señales no verbales, como la postura, los gestos y el contacto visual, lo cual puede ofrecer una visión más completa de la personalidad del candidato. Si bien las entrevistas presenciales ofrecen una experiencia más rica, también conllevan ciertos desafíos. Los desplazamientos para ambas partes, especialmente para loscandidatos pueden generar costos y tiempos adicionales. Además, en un contexto donde las empresas están optando por modelos de trabajo remoto o híbrido, los candidatos pueden sentirse incómodos al tener que desplazarse para una entrevista que podría haberse realizado virtualmente.
La Combinación Perfecta: Entrevistas Híbridas
La combinación de entrevistas virtuales y presenciales, conocida como modelo híbrido, está ganando terreno como una de las tendencias más prometedoras para el futuro del reclutamiento. Este enfoque flexible ofrece lo mejor de ambos mundos: la eficiencia y la accesibilidad de las entrevistas virtuales, junto con la conexión personal y la evaluación profunda que brindan las entrevistas presenciales.
En el modelo híbrido, las primeras rondas de entrevistas suelen ser virtuales, lo que permite a las empresas filtrar a los candidatos de manera rápida y eficiente. Luego, los candidatos finalistas son convocados a una entrevista presencial, donde se lleva a cabo una evaluación más detallada de su perfil y se les brinda la oportunidad de conocer el ambiente de trabajo.
Al combinar lo mejor de ambos mundos, las empresas no solo optimizan el proceso de selección, sino que también generan una experiencia más completa y accesible para todos los involucrados, ofreciendo flexibilidad y comodidad tanto para el entrevistador como para el candidato.
María Lucía Gómez N
Gerente de Gestión Humana